
Para millones de personas y pequeñas empresas en América Latina y el Caribe, enviar dinero al extranjero o realizar pagos transfronterizos continúa siendo un proceso complejo y costoso. Entre las barreras más comunes se encuentran las altas comisiones por transacción, los lentos tiempos de procesamiento, la incertidumbre sobre los costos y la disponibilidad de los fondos, y la limitada interoperabilidad y acceso a infraestructuras digitales.
Estas ineficiencias han obstaculizado durante años la inclusión financiera e impuesto costos significativos a familias y negocios que dependen de transacciones internacionales. Sin embargo, en años recientes han surgido nuevas infraestructuras digitales basadas en tecnología blockchain que reducen el número de intermediarios y permiten transferencias de valor más rápidas, económicas y transparentes.
En el centro de esta transformación está la tokenización, un proceso que usa blockchain para redefinir cómo se representan, gestionan y transfieren los activos financieros.
En los últimos años, BID Lab ha apoyado este tipo de innovación en toda la región con el fin de promover la inclusión financiera, construir una infraestructura digital basada en blockchain (LNet) y mejorar los pagos transfronterizos. En esta publicación presentamos las tendencias más recientes en tokenización en la región y las oportunidades que se avecinan, temas que se discutirán a fondo en nuestro seminario sobre tokenización el 4 de noviembre durante el FinnLAC Forum, un evento del Grupo BID que se llevará a cabo en Miami durante el 4 y 5 de noviembre.
¿Qué es la tokenización?
La tokenización se refiere al uso de la tecnología blockchain para convertir derechos sobre un activo —como dinero, bonos o depósitos— en tokens digitales que pueden crearse, gestionarse, y transferirse de forma segura. Entre sus aplicaciones más destacadas se encuentran las stablecoins, las monedas digitales de bancos centrales (CBDC por sus siglas en inglés), los depósitos tokenizados y los activos del mundo real, según nuestra reciente publicación Tokenization and Development: Framework and Insights Deck (documento solo disponible en inglés).
Las stablecoins son activos digitales diseñados para mantener un valor estable, respaldadas por una moneda fiduciaria o una cesta de activos líquidos. Aunque forman parte del ecosistema crypto, difieren fundamentalmente de las criptomonedas volátiles como Bitcoin o Ether. Las stablecoins bien diseñadas están respaldadas por reservas y buscan mantener la estabilidad de precios, aunque existen riesgos de desanclaje y los estándares de verificación de reservas varían según el emisor.
Como resultado, las stablecoins han surgido como una alternativa global para pagos y remesas transfronterizas no solo por estar respaldadas por una moneda fiduciaria, sino también porque la tecnología blockchain subyacente permite la liquidación instantánea en cadena, confirmación en tiempo real y menores costos de transacción, según el informe Stablecoins 2030 de Citigroup (solo disponible en inglés).
Las stablecoins representan una evolución práctica y robusta de las finanzas digitales, que ofrece mayor eficiencia en pagos internacionales, remesas y transferencias transfronterizas con mayor confianza.
A la vanguardia de la adopción
América Latina y el Caribe (ALC) se ha convertido en una de las regiones más dinámicas en la adopción de dinero digital. Los altos costos de las remesas, la búsqueda de métodos de pago más rápidos y confiables y el uso extendido de la tecnología móvil han acelerado el auge de las stablecoins en la región.
De hecho, ALC lidera hoy la adopción mundial de stablecoins. Según Fireblocks (2025), el 71% de las empresas en la región utiliza stablecoins para pagos transfronterizos, y el 75% de las fintechs y proveedores de servicios de pago reportan una creciente demanda de productos basados en stablecoins.
En varios países —entre ellos Brasil, Argentina, México, Colombia, Perú, Chile y Bolivia—, las transacciones con stablecoins ya representan una parte significativa del comercio digital y de las operaciones cambiarias.
Empresas como Braza group en Brasil, con su stablecoin BBRL, y BanColombia, con COPW, han lanzado versiones locales respaldadas por sus respectivas monedas nacionales. A nivel global se espera que el mercado de stablecoins alcance 1.9 billones de dólares para el 2030.
Estas innovaciones están convirtiendo a América Latina y el Caribe en un laboratorio de pruebas para blockchain y tokenización, donde la necesidad de sistemas de pago más rápidos, económicos y sin fronteras impulsa una transformación financiera profunda.
Desafíos regulatorios
El auge de las stablecoins y el dinero tokenizado presenta importantes desafíos regulatorios para los responsables de políticas públicas en todo el mundo. Los reguladores deben equilibrar objetivos contrapuestos: fomentar la innovación, mantener la estabilidad monetaria, proteger a los consumidores, prevenir el financiamiento ilícito y gestionar riesgos sistémicos.
A nivel global, la convergencia regulatoria avanza rápidamente. Europa dio un paso importante con la regulación MiCA (Markets in Crypto-Assets), que exige reservas 1:1 y licencias para los emisores de stablecoins. Por su parte, en Estados Unidos la Ley GENIUS 2025 introdujo un marco legal federal para pagos con stablecoins, definiendo los emisores autorizados, los requisitos de reservas y una supervisión prudencial. Estos avances apuntan hacia un entorno más predecible y seguro para la innovación digital.
En América Latina y el Caribe, países como Brasil, México y Colombia están avanzando en marcos regulatorios para las fintech y los activos digitales, mientras otros exploran cómo integrar estos instrumentos sin comprometer la estabilidad monetaria.
El desafío será escalar la innovación bajo una supervisión proporcional, evitando tanto la sobrerregulación como los vacíos regulatorios.
De los piloto a la escala — Únete al FinnLAC 2025
Cuando están debidamente regulados, los activos tokenizados y las stablecoins respaldados por reservas transparentes y cumplimiento sólido pueden transformar el acceso financiero en toda la región. La tokenización habilitada por blockchain ha dejado de ser experimental: bancos, fintechs y corporaciones están pasando de los proyectos piloto a la implementación a gran escala, aplicándola a pagos, comercio y operaciones de financiamiento.
Estos y otros temas serán parte central del FinnLAC Forum 2025, especialmente durante la sesión sobre tokenización que se llevará a cabo el 4 de noviembre, donde examinaremos el estado actual de la tokenización en ALC, cómo está transformando los sistemas financieros y qué se necesita para escalar de manera responsable. Las stablecoins son el ejemplo más extendido, pero las oportunidades van mucho más allá: desde activos tokenizados y depósitos digitales hasta finanzas sostenibles y nuevos modelos de inversión.
Si te interesa conocer más sobre este y otros temas relacionados con el futuro de las finanzas digitales, regístrate para asistir al FinnLAC Forum 2025.
Fuentes:
Global Blockchain Business Council (GBBC), Digital Asset Glossary (2024).
Citi, Stablecoins 2030 (2024).
Fireblocks, Digital Asset Adoption Report (2025).